Semana terrible. Proceso vírico al acabar la semana anterior que todavía arrastro en el arranque de esta. Hacía años que no tenía fiebre. Me ha dejado baldada, inapetente, aniquilada. Mi único deseo es estar en la cama, durmiendo. Estos últimos días he intentado mantener el tipo, pero no lo he logrado. El día acababa conmigo. Hoy ya tengo diagnóstico y jalea real con ginseng. Empieza una nueva semana que espero sea más tranquila y moderada que la anterior. Por favor, no más sorpresas al menos mientras no esté recuperada.