martes, 7 de diciembre de 2010
Sin playa
Puente de la Constitución en Lanzarote... Sonaba bien. Alejados de la lluvia, del frío, los cuatro juntitos y con la comida hecha. Pues a unos cuantos insensatos egoístas se les ha ocurrido hacer uso del poder desmedido que tienen para luchar por su mejora laboral. A eso todos tenemos derecho, oiga. Claro, pero resulta amoral cuando quien lucha por su mejora laborala es millonario y cuando su gesto provoca que más de 300.000 personas se queden sin vacaciones, la imagen de España (con lo importante que es la imagen hoy en día, leñe) caiga más todavía y el turismo sufra un duro golpe. Pero es que, además, mi familia y yo nos hemos quedado sin vacaciones. Insensatos y egoístas, lo que decía.