domingo, 25 de abril de 2010

Y la de ayer

Mientras su abuelo, de espaldas a nosotros, buscaba un cuento para leer en la estantería, Leo me miró sorprendido y exclamó:
- Mamá, mira, el abuelo no tiene pelo aquí (señalándose detrás de la cabeza). ¿Por qué?
- Porque se le ha caído de tanto pensar.